La compañía Xerox implementa servidores bullion de Bull para virtualizar sus aplicaciones críticas de gestión documental. Estos servidores ejecutan las aplicaciones clave para la oferta de servicios de Xerox: aplicaciones para la lectura automática de documentos y su digitalización, grandes consumidores de CPU y de memoria, servidores de bases de datos y servidores para la autoedición, que tratan ficheros muy voluminosos y que son, por tanto, muy exigentes en entrada/salida, granjas de servidores para la virtualización de los puestos de trabajo, servidores de infraestructura.
Actualmente Xerox está utilizando cinco servidores bullion, dos para su centro de datos principal, dos en espejo en su centro de datos secundario, y uno para sus propias necesidades informáticas.
Asimismo, además de los beneficios de escala ligados a la virtualización, y por tanto a la reducción del número de máquinas físicas, el diseño de bullion, y especialmente su alimentación activa/pasiva patentada, contribuyen a una reducción del consumo eléctrico, del orden del 30%.