La policía de Las Vegas, EE.UU, arrestó al sospechoso de un robo realizado en diciembre de 2010 al complejo turístico y casino Bellagio, con la sustracción de fichas por valor equivalente a unos 1.5 millones de dólares. Presuntamente las fichas con denominaciones de 100 a 25.000 dólares tenían incorporadas etiquetas RFID, lo cual permitió a Bellagio desactivarlas y que por tanto no pudieran cambiarse por dinero en efectivo.
Según los reportes, Anthony Cerleo, de 29 años, fue puesto bajo custodia después que los oficiales de policía realizaran una operación encubierta. Cuando Carleo descubrió que las fichas no tenían valor alguno, trató de vender las de mayor denominación a unos agentes encubiertos antes que Bellagio las descontinuara.