Por ejemplo, en el sector de los mercados de capitales, dado que el volumen de datos y la adopción de algoritmos de comercio aumentan cada día, las instituciones financieras están buscando constantemente nuevas maneras de dar soporte a los volúmenes cada vez mayores de mensajes, y de reducir el tiempo, o estado latente, entre que ocurre un acontecimiento tal como un cambio de precio de las acciones y su respuesta real. La reducción del estado latente para estas compañías puede dar lugar a beneficios y en algunos casos a ganancias de millones de dólares.