Tailandia lanzó el primer prototipo de un escáner de iris, producido totalmente por investigadores y desarrolladores de ese país. El mismo puede ser utilizado para la autentificación de la identidad de las personas en lugares en donde se requieren altos niveles de seguridad.
Hasta el momento, Tailandia venía importando dispositivos de este tipo. Sin embargo, luego de dos años de trabajo los investigadores tailandeses realizaron la prueba del primer lector de iris producido localmente. Para los primeros ensayos utilizaron cámaras infrarrojas para tomar los registros del iris de 200 personas, las que luego fueron comparadas con el reconocimiento de los lectores biométricos. Las fallas en las lecturas del nuevo dispositivo fueron solamente del 0.0014%.