Entre los planes de esta compañía, también destacan el lanzamiento de nuevos lectores de mano que incorporarán el estándar Generation 2 y múltiples capacidades gracias a su colaboración con Vue Technology.
Además, su participación en sendos programas mundiales de seguimiento de equipajes, paquetes y correo no son, según sus responsables, sino una confirmación del RFID como tecnología de seguimiento orientada al mercado vertical de la cadena de suministro, que será una realidad en 2006. Una tecnología en la que, a su juicio, cada vez está más interesada el sector público y privado, como prueban las adquisiciones realizadas por el Departamento de Defensa de EE.UU. y el gigante de los centros comerciales Wal Mart para su uso en 2006.
Además, la consultora Gartner prevé que el gasto en RFID se acelerará considerablemente de 2006 a 2007. Este año se espera cerrar con un 39% más de gasto que en 2004, es decir 504 millones de dólares, cifra que se transformará en 751 millones a finales de 2006 y en 3 billones para 2010.
Pero para que estas cantidades se cumplan, hay que solventar algunos obstáculos como el alto precio de las implementaciones RFID, debido al alto coste de las tags y su, de momento, baja disponibilidad. Phil Lazo, Director General de infraestructuras RFID de Symbol, cree que los precios bajarán en 2006 porque su volumen aumentará; de momento, esta empresa, por su parte, prevé producir 40 millones de tags el próximo año.
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