El pasado 20 de octubre ha tenido lugar en Madrid la reunión anual de Alfresco con sus partners, clientes y posibles clientes. CMS-Spain.com publicará mañana una completa crónica del evento.
Bueno, bueno. ¡Cómo cambian los tiempos! Quién ha visto y quién ve ahora a los que hasta hace nada considerábamos los desarrapados del “Open Source”. En la reunión de Alfresco en el Hotel Galgos de Madrid pudimos ver ya casi el mismo número de corbatas que de camisas, sintomático de que la visión que del “Código Abierto” empiezan a tener las grandes empresas consumidoras de software o desarrolladoras, así como los grandes consultores – integradores está cambiando. Es evidente.
Y es que los ajustes presupuestarios que está exigiendo la crisis son insalvables para todos los departamentos y para todos los sectores. Quizá sea éste el gran espaldarazo que vaya a recibir el Open Source en los escalones de las aplicaciones corporativas (ERP, BI, ECM…) que es dónde aún no tiene ni mucho menos una aceptación importante el Open Source.
Lo que sí que está claro es que nuestro país está a la cabeza en equipos de desarrollo de Open Source y en miembros de las comunidades de desarrollo. Según los datos de Alfresco España está en el tercer lugar en número total de personas involucradas en comunidades de software open source, y esto aunque sólo sea porque rompe la tradicional tendencia de nuestro país a aparecer siempre el primero por la cola en todos los ránkings significativos, es importante.
Lo que no me parece correcto es que , como también suele suceder, nos convirtamos en más papistas que el Papa. Correcto que el interés de nuestros programadores y técnicos sea alto por el Open Source, pero esto no implica que desde las administraciones públicas pierdan la cabeza y el bolsillo (¡de todos!) en apoyar únicamente la adopción del Open source como único estándard válido.
En un país como el nuestro donde la competitividad y la productividad de nuestras empresas brilla por su ausencia; un país que tiene que competir con las pescaderas chilenas por el norte, con las jugueteras chinas por el este, los espejos solares alemanes por el sur y los astilleros koreanos por el oeste, lo importante no es si las empresas adoptan Open Source o Comercial o lo que quieran; ¡lo importante es que adopten software! El que sea, pero que lo adopten, que adopten TIC. Esa es la cuestión.
Tanto en el debate político como en el económico como en el regional España es un país en el que no se suelen enfocar bien los debates ni establecer correctamente las prioridades. No hagamos que en el terreno de la adopción de las TIC en las empresas el foco se ponga en si se adopta Open Source o si se adopta Comercial: que se adopte el que sea, pero que se adopte.
No establezcamos peleas infructíferas entre techniks anti-Microsoft y encorbatados pro-comerciales cuando estos debates se lo pueden permitir quizá otros países donde no es un problema la adopción de TIC por las empresas, dónde la adopción de las TIC en el tejido empresarial es un hecho consumado, dónde nadie ve ilógico que una empresa de 50 empleados gestione procesos con un BPM o que la dirección acceda diariamente a un completo cuadro de mandos para seguir el día a día de los datos de la empresa. Esto aquí y ahora no es lo habitual.
Da igual que sean galgos o podencos, lo importante es que caze conejos.