La creciente evidencia de las Reglas de Negocio (Business Rules) se ha puesto de manifiesto con la rápida difusión de los nuevos sistemas BPM (Business Process Management) que, siendo por sí mismos un nuevo paradigma de enfoque de la operativa empresarial, pueden ser notablemente mejorados si las Reglas de Negocio, en lugar de estar embebidas en los propios procedimientos operativos, se mantienen como una tribu independiente, aunque en íntimo contacto con los Procesos.
Esto permite que los Procesos puedan mantenerse prácticamente sin cambios (excepto los derivados de las mejoras introducidas en su diseño) ya que la mayor parte de los cambios se derivan de las variaciones del entorno empresarial (mercado, políticas, estrategia, etc.), que es justamente lo que queda definido en las Reglas de Negocio. Con este enfoque, los cambios se introducen en las Reglas de Negocio y los Procesos quedan automáticamente adaptados a las nuevas situaciones.