El RFID es la última tecnología que ha afrontado el escrutinio de las empresas de seguridad y, según afirma el director de desarrollo de negocios del proveedor EMEA Otto Kilb, sus vacíos no suponen un riesgo para la empresa: “Las empresas de seguridad han encontrado defectos potenciales, pero son sólo eso, defectos potenciales”.
La Gen 2 de etiquetas RFID incorpora protocolos de seguridad que incluyen passwords de protección contra falsificaciones y es, según los expertos, la principal garantía contra los problemas de falsificación. “Y eso es sólo la punta del iceberg en cuanto a características de seguridad de los RFID, ya que la tecnología evoluciona diariamente. Por lo que ante los riesgos no hay razón para asustarse, tome las precauciones más sensatas y su base de datos estará a salvo”,concluye Otto Kilb.