Las tarjetas inteligentes son pequeños computadoras, formadas por microprocesadores, memorias independientes y sistemas operativos, y están en capacidad de gestionar aplicaciones y almacenar datos que se relacionen con servicios independientes. Esta característica les permite prestar servicios de valor agregado independientes a la actividad bancaria.
La primera entidad financiera en comenzar un proyecto relacionado con esta tecnología es AV Villas, que ya tiene en funcionamiento 2.600 tarjetas inteligentes (2.200 de débito y 400 de crédito), como parte de un plan piloto que lanzó entre sus funcionarios.