Este estudio reveló que la mayoría de las empresas (46%) no ha realizado ningún tipo de evaluación de los riesgos a los que se expone por carecer de pruebas electrónicas fiables, un 33% reconoce un riesgo alto, el 12% reconoce un riesgo medio y el 6%, un riesgo bajo.
La encuesta reveló, entre otras cosas, que las empresas tienen poca conciencia sobre la importancia de la seguridad de las transacciones electrónicas. Sólo el 27% de las empresas analizadas tienen o tendrán sistemas de seguridad de la información. Por otro lado casi el 70% están convencidas de que el incremento de la seguridad de la información mejorará la eficiencia de las TI en sus empresas. Por otra parte, se reveló que el método de identificación de usuarios más utilizado es el de usuario y contraseña. Por otro lado, el uso de firmas electrónicas avanzadas y DNI electrónico, aún no está muy extendido.
Otro dato importante fue que el 60% de las empresas reconocieron tener dudas sobre la autenticidad de los correos electrónicos provenientes de la otra parte ante los tribunales. Asimismo, el 40% de las empresas dijo haber tenido problemas para aportar pruebas electrónicas en Sede Judicial, y la mayoría de estas señaló que se debe a la falta de medios técnicos.
Por último, se concluye que la mayor parte de las dudas de la validez jurídica de las evidencias digitales se centran en las pruebas que soportan las transacciones electrónicas.