El sistema de prisiones de Texas será el primero en EEUU en utilizar las huellas digitales de sus reos para revisar el estatus de inmigración. Los oficiales del Departamento de Justicia Criminal de Texas (DoCJ, por sus siglas en inglés) usarán un nuevo programa federal para obtener los antecedentes de sus reclusos.
El programa les permite a los oficiales del DoCJ acceder a la base de datos biométrica del Departamento de Seguridad Nacional de EEUU y revisar los archivos que tengan información sobre sus presos. Se revisarán los casos de los reos que aparezcan en la base de datos y se tomarán medidas en dependencia de la seriedad de los delitos.