StarChase denomina a la tecnología “gestión de persecución en tiempo real mediante etiquetaje y seguimiento”. El jefe del Departamento de la Policía angelina, William Bratton, califica de “increíble” a la tecnología. “Les dejamos ir, y sólo tenemos que seguirles hasta alló donde dejen el coche”.
La compañía responsable del sistema asegura en un video promocional que hay más de 100.000 persecuciones al año a gran velocidad en EEUU, lo que pone en serio peligro a todo aquél que se encuentre en el área de la persecución. Con esta tecnología, la policía puede seguir a distancia al vehículo, mientras desde una central de seguimiento se lanzan esfuerzos coordinados para detener al sospechoso.
La señal del tag RFID se dirige vía satélite a un servidor web seguro, y con esa información se pueden observar los movimientos del vehículo en tiempo real. Desde StarChase aseguran que la información registrada por la solución es admitida por un tribunal y que conserva la cadena de pruebas.
La Policía de Los Ángeles está llevando a cabo las primeras pruebas, y espera tener el sistema operativo a finales de 2006. “Creemos que estamos ante una nueva gran idea para la policía americana”, ha asegurado Bratton.
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