El proyecto, encargado al centro tecnológico Cetemmsa, incorpora un probador inteligente además de la gestión TPV con RFID. Para el fabricante, la solución supone mejorar la gestión de inventario, de stocks y los procesos de logística, marketing y ventas. A la tienda le permite evaluar el comportamiento de las prendas y gestionar eficazmente tanto ventas, como reservas y devoluciones.