Parte de la iniciativa incluía un plan para utilizar RFID con el objetivo de seguir las carretillas elevadoras y los contenedores. Ortrander contrató al Centro de Aplicaciones Fraunhofer para Planificación de Sistemas Logísticos y de Información (Fraunhofer ALI), para que les pudieran ayudar a encontrar en el mercado el sistema de gestión de la información basado en RFID que más se adecuara a sus necesidades de procesos de producción en entorno industrial. Específicamente, la compañía buscaba sistemas RFID que pudieran trabajar correctamente a pesar de las duras condiciones de la fundición y el entorno metálico que podría interferir con las ondas de radio de los sistemas RFID.
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