La ciudad danesa Veje tenía problemas con la estación de autobuses, porque la capacidad para recibir autobuses era muy reducida. La estación estaba localizada en el centro de la ciudad, por lo que era imposible extender la zona del terminal. Para mejorar el servicio y maximizar la capacidad, el ayuntamiento implementó un sistema de RFID para la supervisión del tráfico.

El sistema gestiona 149 autobuses, 800 salidas y llegadas cada día y la solución de RFID dirige los autobuses a su lugar dentro de la estación, flexibilizando la asignación y permitiendo a los autobuses aparcar dónde haya espacio libre. El sistema también indica la plataforma de salida y llegada a los pasajeros que esperan dentro de la sala de espera.

Por Editorial

Deja una respuesta