Según un reciente informe de IDC sobre la repercusión del modelo SaaS en las empresas españolas, en 2012 su penetración ascenderá al 18%. Actualmente, sólo un 6% del tejido empresarial de nuestro país disfruta ya sus ventajas, con lo que su implementación se multiplicará por tres en los próximos tres años.
La firma y factura electrónica en formato SaaS resulta especialmente atractiva para empresas que, bien por su propia infraestructura o bien por sólo requerir de firma y e-factura en momentos puntuales, no se decantan por implementar un sistema de este tipo.
Ahora, contratándolo en modalidad de software como servicio, pueden pagar únicamente por cada factura que emitan o por cada documento que necesiten firmar digitalmente.
Ejemplo de ello es la solución BT Signum de BT España. Con el software de ipsCA, BT ofrece a sus clientes firma y facturación electrónica en formato SaaS, así como archivado de documentos digitales con valor probatorio. BT Signum gestiona todo el ciclo de vida de un documento firmado electrónicamente, incluyendo la custodia de la prueba documental.
SaaS permite conectarse y suscribirse a servicios creados en una infraestructura compartida a través de Internet. En consecuencia, la implementación es inmediata y los costes iniciales se reducen, integrándose los nuevos servicios a la perfección en la infraestructura TI de una empresa.
Los servicios SaaS están llamados a convertirse en la referencia del mercado, frente al tradicional enfoque de cliente-servidor. Con ellos, el usuario sólo paga por el uso de servicios y aplicaciones a los que accede a través de la Red, y se elimina la necesidad de adquirir licencias. Ahora es el proveedor quien se encarga de la gestión de la infraestructura y de las aplicaciones, con lo que tampoco es necesario preocuparse por el mantenimiento.