El BI se extiende cada vez más a los sistemas operacionales de las compañías y las ventajas de la implementación de una estructura estandarizada son:
– Soluciona el problema de la fragmentación de datos.
– Favorece el control de los gastos (al observar redundancias en la realización de tareas por el personal, realización de esfuerzos, generación de información…)
– Mejora la calidad de los datos y agiliza los procesos, invirtiéndose en ellos menos tiempo.
– Permite alcanzar un ROI cuantificable al reducir el número de productos de diferentes fabricantes, así como los gastos de mantenimiento y formación.
– Facilita un uso más eficaz de la información: “Cuanto más se entienda una información, más valor tendrá”.