Cada vez que nos enfrentamos a una nueva tecnología, como en el caso de la RFID y su uso para identificar a las personas, nace una urgencia prematura por crear leyes que la restrinjan o la frenen. Es el caso del Estado de California contra el uso de RFID en las licencias de conducción y los carnets de biblioteca o la controversia creada por la futura implantación de RFID en los documentos de identificación de los ciudadanos de Gran Bretaña.
Este documento analiza los orígenes del debate sobre la necesidad de legislar respecto al uso de sistemas RFID en la identificación de las personas y sostiene que la legislación puede frenar la innovación tecnológica y eliminar beneficios para los ciudadanos. El documento defiende la educación frente a la restricción y destaca que la privacidad y la seguridad no se excluyen mutuamente.