Las impresoras son identificadas colocando una etiqueta RFID en el fondo del gabinete, esta etiqueta incorpora el número de serie de la impresora y el número de parte al inicio del proceso de fabricación. HP utiliza una etiqueta con un número estandarizado de Código Electrónico de Producto (EPC). Los lectores RFID son colocados en diferentes ubicaciones a lo largo de la cadena de suministro, capturando y almacenando la información de cada tag del producto. Esto crea un «ADN del producto» que viaja junto con la impresora a través de la cadena de suministro en su totalidad, con un tag RFID por producto.
Acceda al Caso de estudio completo a través del archivo adjunto.