En el otoño de 2007, un puñado de funcionarios del Departamento de Seguridad Nacional de EE.UU (DHS) fue invitado a asistir a una demostración en vivo de cómo una bomba escondida en un contenedor de carga comercial puede ser detonada por un sistema RFID de fabricación casera.
Cabe destacar que Al Qaeda estudió los métodos para utilizar los contenedores de carga para transportar bombas. Por ejemplo, después de 9/11, Saifullah Paracha Abdullah, un paquistaní residente en EE.UU., que utilizaba los contenedores de carga para el transporte de productos que fabricaba para EE.UU., estuvo íntimamente involucrado en la concepción de las parcelas para el transporte de las bombas (posiblemente incluyendo explosivos radiológicos) en los EE.UU., dentro de contenedores de carga.