Se trata de un dispositivo que permitirá monitorizar a enfermos, tanto en sus domicilios como en centros hospitalarios, mediante tecnología RFID. Un instrumento lector detectará e identificará el apósito en el que se integra el microcircuito RFID que, al activarse, emitirá en tiempo real los valores de los patrones fisiológicos medidos (temperatura y pulsaciones por minuto). De esta forma, se podrá obtener la información siempre que se requiera, a distancia, y sin necesidad de molestar al paciente (por ejemplo, mientras está dormido).
El prototipo es fruto de un proyecto de investigación que la Consejería de Economía, Innovación y Ciencia ha financiado con 119.168 euros, cuyos resultados serán patentados una vez concluyan las pruebas de campo que se están realizando.