El estado norteamericano de Illinois deja de usar la biometría para comprobar el estatus migratorio de las personas que son detenidas. Así lo afirmó el gobernador Pat Quinn, quien asegura que el programa Comunidades Seguras, en el que el FBI comparte las huellas digitales con el Departamento de Seguridad Nacional para comprobar automáticamente el estatus migratorio de una persona detenida, es defectuoso.

Cabe destacar que el objetivo de Comunidades Seguras es sacar a las personas condenadas por delitos graves que viven ilegalmente en Estados Unidos. Cuarenta y dos estados participan del programa.

Sin embargo, el gobernador Quinn afirma que muchos de los deportados a través del programa no han cometido delitos graves.

Por Editorial

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