De todas las promesas incluidas en el concepto de Business Intelligence, la posibilidad de poder gestionar de una manera rápida y flexible el comportamiento de una determinada organización resulta de las más atractivas a sus directivos. Pero, ¿cómo ayudarse de las nuevas tecnologías para que la empresa pueda reaccionar inmediatamente ante un entorno de negocio en continuo cambio?

Mientras hoy ya nadie duda que la información resulta un activo esencial para cualquier organización, son pocos los que podrían señalar como optimizar este activo en su desempeño diario. Son pocas las empresas que todavía hoy no planifican y actúan por objetivos. La dificultad reside en medir y monitorizar el desempeño de la organización en el cumplimiento de éstos. La gestión del desempeño de una compañía se encuentra en la mayoría de los casos dispersa en diferentes elementos que afectan por separado al presupuesto, planificación, realización de informes o gestión rígida de cada uno de los departamentos.

La tecnología permite hoy dar un paso de gigante en la manera que hasta el momento hemos hecho previsiones de futuro, detectado qué elementos y de qué manera afectan a la consecución de los objetivos propuestos, medido la responsabilidad de cada uno de las partes integrantes de la empresa, o cambiado planes previstos como reacción ágil a un cambio en el entorno.

Este documento de 16 páginas explica en qué consiste el concepto de Coorporate Performance Management y cómo la tecnología del Business Intelligence tiene mucho que ver con ello.

Por Editorial