Los sistemas sensores permitirán a los militares monitorizar y controlar el desgaste natural de los vehículos, del armamento pesado y de otros equipos. La combinación de tecnología MEMS y RFID ofrece información más precisa y actualizada sobre dónde y cuándo el sistema de armamento necesita mantenimiento. Esta forma de control puede reducir los costes del servicio de mantenimiento y aumentar la seguridad del personal militar. Además, a diferencia de otros métodos de gestión, esta nueva tecnología puede controlar la vida de los componentes individuales de cada subsistema.
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