Realizar una compra sin tener que hacer una fila para pagar puede hacerse realidada mediante un teléfono inteligente habilitado con NFC. De esta manera, el cliente camina hasta el lector NFC o dispositivo para efectuar la compra, hace que éste lea las etiquetas RFID en los productos que ha adquirido y a continuación da un toque con el teléfono mediante lo cual envía el pago.
Así las cosas, la cominación de tecnología NFC junto con las etiquetas RFID puede lograr que las largas filas se conviertan en algo del pasado.
En tanto, para evitar que alguna persona deshonesta salga sin pagar, la puerta puede bloquearse si las etiquetas RFID no han sido desactivadas.