SAS, fabricante de tecnología de BI con presencia en España, ofrece una solución completa, centrada en la integración de datos, que permite que las instituciones financieras cumplan con la nueva Directiva MiFID, cuyos requerimientos serán obligatorios a partir del próximo 1 de noviembre de 2007.
El objetivo de MiFID es incrementar la protección del consumidor, introducir más garantías para los inversores y permitir a las firmas inversoras operar más allá de la Unión Europea bajo reglas estandarizadas de sus reguladores locales. Eso supone que las instituciones financieras deberán alcanzar un nivel en la retención e integración de la información que sobrepasa las prácticas generales habituales.
SAS alerta de que, en este nuevo marco, contar con capacidades de integración de datos insuficientes es una barrera tecnológica que pude impedir el cumplimiento con éxito de la Directiva MiFID. Especialmente, se dirige a aquéllas que trabajen con múltiples proveedores para la generación de informes lo que les obliga a integrar múltiples tecnologías.
Para afrontar este nuevo reto, SAS propone soluciones específicas para banca y una plataforma de inteligencia empresarial que permite a las firmas cumplir con los requerimientos para la clasificación de clientes y la transparencia en las operaciones, así como agregar información para apoyar la ejecución y la generación de informes de clientes.